Los ornitólogos Saturnino Moreno Borrell y Chelo Atencia Páez recopilan, en la revista malagueña Jábega, un amplio número de datos de carácter ornítico referidos a su provincia hasta ahora dispersos. La necrofagia atrae a investigadores y paisanos como se constata en los datos aportados por numerosos viajeros. Charles Waterton (1782-1865), viajero y naturalista, autor de Wandering in South America y Essays on Natural History, está en el sur de España en 1803, donde es testigo de una epidemia de fiebre amarilla que acabará con la vida de su tío y con la de 38.000 malagueños y de la que comenta: “En las playas se podía ver a los buitres picoteando y dando tirones a los cuerpos humanos que el viento de levante empujaba a la costa desde mar adentro donde habían sido llevados en barcazas tras sucumbir víctimas del vómito negro.” El londinense Richard Ford (1796-1858) incluye en su famoso Manual para Viajeros por Andalucía y lectores en casa la siguiente reflexión: “Los españoles, como los orientales, dejan con frecuencia los muertos para los buitres. (...) España es la tierra del buitre; bandadas de buitres se ciernen sobre los cadáveres y se elevan mohínos en cuanto se les molesta, escindiendo el aire ligero con sus pesadas alas.”
El Bestiario de Ferrer Lerín
Galaxia Gutenberg. 2007.
sábado, 16 de febrero de 2008
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