domingo, 27 de enero de 2013

Necrología 3




Albino



Murió Albino. Gigante, indeciso, gafas oscuras perpetuas. Se le vio durante años pasear, detenerse agotado, apoyarse en las puertas como si fuera a entrar en las casas, por ese lugar difuso que es la plaza España y la Gran Vía ya saliendo al aeropuerto. Muchos debieron de hablar con él porque quedan testimonios de su pensamiento recogidos en la prensa y en varios libros de carácter ligero y misceláneo. ¿Vivía en...? Puede que en la calle Tarragona o, mejor, en esa tupida red viaria que la flanquea a la derecha en sentido descendente, en esas casuchas pegadas a los corrales del antiguo matadero, quizá no en una casa sino en un corral, en el corral incluso que albergó a la ternera Celia, la que produjo las mejores carnes de 1956, las que permitieron que el chef Bartrés ganara el premio al mejor fricandó. Pero ahora ¿aún existen esas cuadras? Puede, pero nadie lo sabe con certeza. A lo mejor, en la base del más elevado de los rascacielos, dejaron un espacio, una burbuja hormigonada, para mantener en pie un minúsculo habitáculo de ladrillo ¿y adobe?: el cubil de Albino. “¡Qué rancho, devoraba ratas!” sentenciaba un malévolo, también los guardias, acicalados, le acusaban de ladrón: restos no sólo cárnicos, también algún pescado y la extraña fruta con sabor a heces. Hubo dos viajes, sarnosos. Una turbamulta: pordioseros, enfermeros, clérigos, hermanas de la caridad. Primero a la Meca blanca, en Roma, en busca de la bendición. Segundo al África negra, a socorrer refugiados. Albino destacaba. Su porte. Su blancura. Su fuerte hedor. Peregrinos entre la guardia pretoriana vaticana. Sanitarios entre ventrudas criaturas y madres multíparas. El periodista juvenil y perplejo define a Albino como protoinventor. Cuenta en su columna del diario gratuito que “les regalaron bolígrafos bicolores y Albino supuso que con el rojo escribiría en español y con el azul en italiano (...) se trata de un genio en ciernes, esa maldición bíblica y real de las lenguas queda solventada con un ligero artilugio que nuestro hombre quiere desarrollar a partir de un souvenir de atrio de iglesia”. África no fue menor, no produjo un invento de menor importancia. Albino anticipó a Lovelock y Sartori y comprendió que la solución no estaba en curar negritos sino en evitar que nacieran tantos. Enseñó a la corresponsal del Post una cacerola oxidada de la que colgaban cables al tiempo que le advertía que el dolor en esos países era insoportable y que con esta máquina, con el Detector-Medidor de Sufrimiento, iba a convencer de una vez por todas a las autoridades mundiales para que iniciaran una campaña seria y definitiva de control de la natalidad. “El problema hay que cortarlo de raíz”, repetía, “nada de parches, Albino no quiere ver más mujeres y niños sufriendo”. El fotógrafo Pablo J. Pérez obtuvo, estas Navidades, su última instantánea y sus últimas palabras. Acurrucado en el portal de la Casa de la Papallona se disponía a afrontar su última noche de vida abrazado a una bolsa de plástico que relucía bajo la farola. “¿Qué llevas ahí?”, le preguntó J. Pérez, a lo que respondió Albino, “llevo un alijo de polvorones”. ANGÉLICA YETANO  

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Barcelona. Calle Llansá. Casa Fajol -La Papallona-.

11 comentarios:

Istefel dijo...


Próximo Dux.

http://www.blogger.com/comment.g?blogID=809512702803626582&postID=1625396855558434241

Anónimo dijo...

Magistral.

El Pobrecito Hablador del Siglo XXI dijo...

Lo siento, pero a Lovelock, y también a Albino, se anticipó Tolstoi

Anónimo dijo...

Tolstoi tuvo 13 hijos, no veo en esto un anticipo del discurso de Lovelock y Sartori sino más bien todo lo contrario.

El Pobrecito Hablador del Siglo XXI dijo...

Anónimo de las 9.00:

En "Resurrección" de Tolstoi se plantea de un modo muy muy claro la teoria de Gaia, de Lovelock

" Si un microbio estudiara y analizara la uña de un hombre, llegaría a la conclusión de que es un ente inorgánico. De la misma forma, nosotros hemos llegado a la conclusión de que el globo terráqueo-estudiado en su corteza- es un ente inorgánico. Eso no es cierto."

Quien dice esto es Simonson, un preso político, prerrevolucionario, que es trasladado a Siberia junto a Katiushka Maslova, la protagonista de la novela.

Creo que tu te refieres a otra teoría: "La tragedia de los comunes", de Garret Hardin (1968).
¡salud!

Perpetuum dijo...

Con independencia de las teorías de Lovelock y por una asociación de ideas personal (Warhol, Disney, Glass), me he imaginado enseguida a Albino, ante el portal de ese edificio coronado por la gran mariposa. Más aún, le he puesto -permítaseme la libertad- cara y nombre: Andy Warhol.
Colocada la información de la necrológica sobre la percha “Warhol bajo La mariposona”, no diré que me extrañen ni sus teorías ni su conducta. No tengo noticias de que Warhol viajase a Barcelona, aunque sería lógico pensar que lo hizo, antes o después de su viaje a Madrid para inaugurar la exposición en la Galería Fernando Vijande en el año 83. Pero ignoro si hay documentación al respecto. En los diarios de Warhol ni siquiera se hace mención de su viaje a Madrid.

Anónimo dijo...

Sr. Pobrecito Hablador: Me parece que hablamos de cosas distintas, me refiero no a la teoría Gaia si no a la explosión demografica que como el Sr. Ferrer Lerin ha señalado en repetidas ocasiones es la causa primera en amenazar la continuidad de la vida en nuestro planeta Tierra

El Pobrecito Hablador del Siglo XXI dijo...

Anónimo de las 9h y de las 3,25h

Hardin dice:

"Un mundo finito puede sostener solamente a una población finita; por lo tanto, el crecimiento poblacional debe eventualmente igualarse a cero"

O ésto otro:

"Poco progreso lograremos en la búsqueda de un tamaño óptimo de población mientras no exorcicemos de manera explícita al espíritu de Adam Smith"

No sé si Lovelock habla de una manera tan clara al respecto del problema de la superpoblación y del consumo de energía y de recursos. Creo que el artículo de Hardin fue una bomba, ya que, parece ser, utilizó las leyes de la termodinámica para demostrar su tesis

El artículo de Hardin puede encontrarlo en Internet sin problemas, googleando. Busco ahora también lo que dice Lovelock al respecto

¡Salud!

Anónimo dijo...

y lo que dicen Sartori, y Grisolía...

El Pobrecito Hablador del Siglo XXI dijo...

También, también...

Anónima dijo...

A lo mejor son también muy interesantes pero los temas de si Tolstoi sí o no me resultan secundarios. Para mi son de apreciar temas como la descripción de la vida de Albino, como su dieta, los cachivaches que inventa y su respuesta al periodista Perez "llevo un alijo de Polvorones".