domingo, 5 de diciembre de 2010

De la trashumancia

Era don Paco de pequeña estatura, de pulcritud extrema, austero hasta la exageración, de una sobriedad a toda prueba y de un carácter en el que se combinaban de manera perfectamente armónica la familiaridad y el señorío, sin caer jamás ni en la vulgaridad ni en el orgullo. El invierno lo pasaba en su casa de Madrid. En la primavera, cuando llegaba la época del esquileo de las ovejas, se trasladaba a sus dehesas y pasaba cuatro semanas instalado en una habitación de la casa de los guardas, más austera y desnuda que la celda de un cartujo. Terminado el esquileo, y cuando los rebaños emprendían su marcha hacia los “puertos” de Babia, don Paco se instalaba en su casa de Hospital de Órbigo, en la que esperaba su paso hacia las montañas leonesas. El mes de junio lo pasaba en León, y los de julio y agosto en Villablino. En el otoño volvía a hacer, en sentido inverso, el mismo recorrido de la primavera, a saber: León, Hospital de Órbigo, donde veía pasar a los rebaños de vuelta a sus pastos de invierno; las dehesas de Zamora hasta que les dejaba instalados en sus apriscos para la invernada; y allá para primeros de noviembre retornaba a su casa de Madrid, coincidiendo con el principio de la temporada de ópera en el Teatro Real, que seguía fielmente.

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Pablo de Azcárate, La Fundación Sierra-Pambley
Papeles de Son Armadans, Núm. XCIV, 1964
Págs. 83-84

15 comentarios:

Francesc Cornadó dijo...

También debían seguir por las cañadas del valle de Omaña, por Urz, Pandorado, La Omañuela o siguiendo el curso del río Omaña hasta el valle de Luna, Murias de Paredes... plácidas tierras.

Francesc Cornadó

La Vieja Dama dijo...

Inteligente, sensible, culto y conocedor de las grandes satisfacciones de la vida nuestro Don Paco. El verano en León (Babia, Villablino, Hospital...)Casi nada!! Y la temporada de ópera en Madrid...

http://carealeones.blogspot.com/2010/03/careas-y-mastines-en-los-puertos-de.html


Gracias.

Anónimo dijo...

Como siempre pasa la sutil ironía de sus entradas pasa inadvertida al menos por lo que se desprende al leer los comentarios.

anonimoafectado dijo...

Quizás no todos los comentaristas consideren necesario resaltar la 'sutil ironía'. Además no entiendo como puede usted decir 'como siempre pasa' ¿es que acaso sabe lo que perciben la inmensa mayoría de personas que visitan el blog de Lerín y que son los que no cuelgan comentarios?

La Vieja Dama dijo...

Y por qué piensa usted que pasa desapercibida, anónimo?

Este, es mi opinión, es un blog para seguidores, lectores y/o admiradores del Sr. Ferrer Lerín, donde creo que la libertad de expresión está permitida.Y él, tiene la amabilidad de cedernos un espacio para nuestros comentarios. No creo que espere crítica literaria ni mucho menos personal. No juzgue usted tan alegremente.

Por supuesto desde la cordialidad. Un saludo.

Lupo dijo...

Estoy de acuardo con ANONIMO. Ya lo dije una vez muchos que hacen comentarios solo tocan cosas colaterales no saben ver la esencia de la entrada.

Otra vez La Vieja Dama, evidentemente afectada también. dijo...

Y sigo...conocía usted, Sr. anónimo algo de la vida de D. Pedro de Azcárate o de la leonesa Fundación Sierra Pambley? Quizás el sutil irónico fuera este último...

un anónimoafectado más dijo...

anónimo, Lupo podrían describir esa "sutil ironía" y esa "esencia" de esta entrada? Quizás de esa manera, aprendamos todos un poco más.

Anónimo dijo...

Vamos a ver yo procedo de una familia en la que huvo pastores de la trashumancia, eran de la provincia de Teruel, era un oficio durisimo y esta claro que el articulo del señor Ferrer Lerín ironiza sobre la trashumancia de salon, la trashumancia de los propietarios señoritos. Además hay una doble ironia que he descubierto al buscar que era la fundación Panbley, que no sabia nada de ella, es que esta institución se vendia como de izquierdas, de la república y este articulo escrito por el señor Azcarate parece hablar de alguien que fuera importante o dueño de esta institución.

Ferrer Lerín dijo...

Efectivamente se produce una paradoja. La Fundación Sierra-Pambley fue, en tierras leonesas, el mayor elemento potenciador de la cultura, y del desarrollo económico en general, desde finales del siglo XIX hasta 1936 en que fue masacrada por el franquismo (por la falange, en especial), no recuperándose hasta finales de los setenta. Sin embargo, en este artículo, firmado por el que fuera patrono de la Fundación, Pablo de Azcárate, se deslizan detalles de la vida de su fundador, don Francisco Fernández Blanco de Sierra-Pambley, que hoy resultan al menos chocantes. El tratamiento que da Azcárate a la descripción de esos detalles está totalmente desprovisto de ironía; aún en 1964 los hábitos de conducta del hidalgo Pambley (fallecido en 1915) eran incuestionables.

Anónimo dijo...

http://www.aytovillablino.com/html/informacion/paco_sierra_pambley.htm

Lupo dijo...

Ya ha quedado claro no debo de aclarar nada

Ángel Cerviño dijo...

Volved al aprisco, que va mucho frío en el cerro

La Vieja Dama dijo...

Ya se van los pastores para Extremadura...

Feliz 2011 para todos.

Joan Marrugat dijo...

Pascual Maragall dice: «el día en que un político ha de dar explicaciones para aclarar algo que dijo ayer, casi siempre es porque ayer habló demasiado claro».

No sé si eso viene a cuento con el tema del post, pero me gusta recordarlo...