La abundancia turgente de las curvas y tramas del gran Crumb. Pura contemplación y admiración de las mamíferas de cualquier lugar y época. Dicen que vive en Francia.
Ajustada, mucho ajustada. Como la lujuria encintada en la ropa deportiva de una diosa desinteresada. Camina —o espera— como si la calle fuera un altar absurdo donde sólo los débiles creen en el pudor.
Yo puedo afilarlo a cualquier filo. Sangrar con mil historias, atravesado por las esquinas del comportamiento humano de las cucarachas que fingen ser hombres. Se desdobla. Pero vuelve a ser Ella.
Indiferente a nuestro estilo. A nuestras metáforas. A nuestros complejos.
Ella es potente combustible. Aumenta la venta de anillos de silicona, en varios tamaños. Por si acaso. Por si regresa. Por si exige.
no la rebasa porque es una traza o signo evidente del paso no del tiempo Sino del pintalabios de Patrocinio. Y esa mujer, aunque ya extinta, sabe de lugares, perfumes y servilletas.
Desatados!!! Don Francesc, buena observación. Crumb documentalista de la conexión y el anhelado encuentro (carnal). Es verano, considérese (e@n el dibujo, digo).
La abundancia turgente de las curvas y tramas del gran Crumb. Pura contemplación y admiración de las mamíferas de cualquier lugar y época. Dicen que vive en Francia.
ResponderEliminarAjustada, mucho ajustada.
ResponderEliminarComo la lujuria encintada en la ropa deportiva de una diosa desinteresada.
Camina —o espera—
como si la calle fuera un altar absurdo donde sólo los débiles creen en el pudor.
Yo puedo afilarlo a cualquier filo.
Sangrar con mil historias,
atravesado por las esquinas del comportamiento humano
de las cucarachas que fingen ser hombres.
Se desdobla.
Pero vuelve a ser Ella.
Indiferente a nuestro estilo.
A nuestras metáforas.
A nuestros complejos.
Ella es potente combustible.
Aumenta la venta de anillos de silicona,
en varios tamaños.
Por si acaso.
Por si regresa.
Por si exige.
Pero no rebasa la línea roja
ResponderEliminarno la rebasa porque es una traza o signo evidente del paso no del tiempo
ResponderEliminarSino del pintalabios de Patrocinio.
Y esa mujer, aunque ya extinta, sabe de lugares, perfumes y servilletas.
La muchacha es una adelantada, va con un telefonillo en las manos. Parece que está esperando a alguien.
ResponderEliminarSaludos
Desatados!!!
ResponderEliminarDon Francesc, buena observación.
Crumb documentalista de la conexión y el anhelado encuentro (carnal). Es verano, considérese (e@n el dibujo, digo).