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viernes, 3 de abril de 2020

Caldwell







































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No me consta que en Los últimos días de Pompeya, la novela de Edward George Earle Bulwer-Lytton, pese a su carácter de nómina, de listado de habitantes preclaros de la ciudad italiana, aparezca el nombre de Caldwell, el intrépido perrito blanco que intenta salvar a Car, su ama, del castigo de la colada piroclástica; al fondo de la imagen se ve a la pompeyana provista de un paraguas, minusvalorando el aviso del cánido acerca de lo que se les viene encima. No hubo suerte con el registro sonoro, se perdió la cinta, y con ella la voz grave de Car repitiendo ensimismada: “Señor Gómez Arias, / doléos de mí, / soy niña y muchacha, / nunca en tal me vi”.

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Fotografía: Elena Cortell


15 comentarios:

  1. Excelente foto y excelente relato

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  2. ¡¡¡¡¡Genial Lerín!!!! Nos tenías abandonados

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  3. Con usted, además de tener una experiencia literaria única, siempre se aprende algo nuevo. He tenido que averiguar qué era la "colada piroclástica".

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  4. Gracias, Tercer Anónimo; intentaré seguir suministrando aceptables experiencias literarias.

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  5. Materiales sólidos calientes, aire atrapado,
    parte basal de gruesa masa,
    como aquella persona inclinada al conocimiento directo de los fenómenos
    que gustaba de la compañía de cánidos salvajes, crocotas
    de hiel negra causada por locura humana
    y de la muerte, si se vomita por completo:
    hasta tal punto es poderosa la ponzoña contenida en esta sustancia
    cuando se difunde en el espíritu.

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  6. no es blanco del todo!!!!!!!!

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  7. -No es blanco del todo!!!!!!!!
    –Tienes razón, pero su lengua suele ser roja.

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  8. suele ser roja en los perros blancos o en los perros de pompeia?

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  9. –¿Suele ser roja en los perros blancos o en los perros de Pompeia?
    –Buena pregunta. A ver, preguntémosle a ese hombre que viene allí.

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  10. https://ferrerlerin.blogspot.com/search?q=hombre+solo


    El capote
    en linimento
    es la respuesta

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  11. –El capote en linimento es la respuesta.
    –Tiene usted razón. Y en las piedras las huellas talladas por las ruedas de las carretas.

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  12. Colarse por turbulencia
    o crecer por presión
    las hay calientes y frías
    a veces suben laderas
    definen el arte atrapado
    agonizan

    por inducción
    instantánea
    rugiente (es evidente)
    o por Pompeya
    caliente es poco decir
    lapilli minucioso
    ágrafo e ígneo
    sabemos como
    talla los caminos
    irrenunciable
    caldera otra vez
    agonizante

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  13. Señor del Vesubio
    Duélete de mí
    que aunque el amor me hizo esclava
    Libre soy y libre nací.



    Extracto del diario"Los últimos días de Car"

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  14. Señor del Vesubio
    Duélete de mí
    que aunque el amor me hizo esclava
    Libre soy y libre nací.



    Extracto del diario"Los últimos días de Car"

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  15. Sombras que tropiezan sin poder encontrarse. Ritual de la muerte en otro escenario.
    Los últimos días. C.

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