Intento describir “una ciudad, cubierta a todas horas de una
fina capa de polvo, que alberga numerosas colonias de avión común”, pero el
nombre de este pájaro hirundínido es de tal inanidad que imposibilita
convertirlo en sujeto del relato, imposibilita la redacción del mismo (cambiar
el nombre no es aconsejable, devaluaría la narración y el conjunto de mi
narrativa). [Avión común, nombre
oficial español de la especie Delichon
urbicum]
Desplazamiento y al foso.
ResponderEliminaral leer a Lerin noto que me falta aire
ResponderEliminarPrueba con avioncillo, se presta más a la fabulación, creo.
ResponderEliminarSí, he oído ese nombre, quizá en La Mancha, pero no deja de ser un localismo, como mucho un regionalismo, y además los diminutivos son de difícil encaje. Gracias de todos modos.
ResponderEliminarGusta verte asomar viejo Andy, compañero de tumba.
ResponderEliminarHombre, Doc. Lo mismo digo. Tomo el aire por aquí de vez en cuando. El maestro Lerín levanta a un muerto.
EliminarÚltimamente se prodiga poco Maestro Lerín.
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